Había dejado a mi hermana, a Victor y a Patri (que se unió a la tropa dos días más tarde) rumbo a Berlín a conocer la capital alemana y allí que me fui a reunirme con ellos durante el último fin de semana que pasarían en Alemania. Acababa de estar en Berlín hacía 2 semanas, pero como no había hecho nada de turismo, pues tampoco me importó mucho volver. Además, así tendría tiempo para pasar algo más de tiempo con mis visitas :P.
Fui con Lorena (casualidades de la vida) hasta Berlín y nos separamos en el metro: cada quien a su casa. Yo fui al hostal que habíamos reservado (no pongo el nombre porque no fue nada especial) que estaba al lado del "centro-cultural-atracción-de-circo-rollo-súper-guay" Tacheles. Al llegar, no sólo me encontré con estos tres, sino que también estaba Rubén (el pintor jajaja) que lleva ya un año viviendo en Berlín. Me hizo ilusión verlo y pude comprobar que seguía siendo "tan especial" como es :P. Esa noche, poco hicimos. Fuimos a cenar comida turca en un sitio-cool-arrastrado-mega-guay que estaba cerca del hostal, justo en frente del Tacheles y, claro, terminamos yendo a visitar el Tacheles. No se puede negar que "la casa okupa" tiene su encanto, pero ya hoy en día termina resultando una atracción turística más, aunque no voy a ser yo el que se queje: ¿qué soy, sino un turista más? Después de estar un rato en Tacheles bailando y tomando algo, nos fuimos a casa. Al día siguiente nos teníamos que levantar para ir a hacer el "free-guided-tour".
El sábado estábamos un poco antes de las 11:00 frente a la "Brandenburg Tor" (junto al Starbucks) para unirnos al "free-guided-tour" en español que desde allí sale todos los días para conocer Berlín: un recorrido por su historia. La guía era una chica andaluza (que muchos confundieron con canaria: ¡pobre gente! jajaja) que comenzó con mal pie, contando esas bromas prefabricadas para la ocasión, pero que luego lo supo arreglar con sobresaliente a lo largo del paseo. Partimos de la Puerta de Brandenburgo y pasamos por el monumento al Holocausto Judío (no sé si es su nombre correcto) para continuar por el búker-secreto-de-Hitler (está debajo de un aparcamiento y todo el mundo lo sabe: ¡vaya secreto!) hasta llegar al "Check Point Charlie" donde hicimos una parada técnica. Después de descansar un poco y de que yo me comiera una tarta de zanahoria (uhmm, ¡qué rico!) seguimos el paseo yendo por "Friedrichstrasse" y desviándonos para pasar por "Gendarmenmarkt" con su dos cúpulas gemelas (una para los alemanes y otra para los franceses). Seguimos hasta la "Bebelplatz" rodeada de edificios antiguos y en la que se puede ver un monumento conmemorativo a la quema de libros por parte de los nazis en 1933. De ahí seguimos por "Unter den Linden" hasta llegar al "Lustgarten" justo enfrente de la catedral de Berlín. Así terminó el tour, con una explicación final apasionante sobre la noche en la que cayó el Muro. El paseo fue genial y se lo recomendaría a cualquier persona que pase por Berlín.
Fui con Lorena (casualidades de la vida) hasta Berlín y nos separamos en el metro: cada quien a su casa. Yo fui al hostal que habíamos reservado (no pongo el nombre porque no fue nada especial) que estaba al lado del "centro-cultural-atracción-de-circo-rollo-súper-guay" Tacheles. Al llegar, no sólo me encontré con estos tres, sino que también estaba Rubén (el pintor jajaja) que lleva ya un año viviendo en Berlín. Me hizo ilusión verlo y pude comprobar que seguía siendo "tan especial" como es :P. Esa noche, poco hicimos. Fuimos a cenar comida turca en un sitio-cool-arrastrado-mega-guay que estaba cerca del hostal, justo en frente del Tacheles y, claro, terminamos yendo a visitar el Tacheles. No se puede negar que "la casa okupa" tiene su encanto, pero ya hoy en día termina resultando una atracción turística más, aunque no voy a ser yo el que se queje: ¿qué soy, sino un turista más? Después de estar un rato en Tacheles bailando y tomando algo, nos fuimos a casa. Al día siguiente nos teníamos que levantar para ir a hacer el "free-guided-tour".
El sábado estábamos un poco antes de las 11:00 frente a la "Brandenburg Tor" (junto al Starbucks) para unirnos al "free-guided-tour" en español que desde allí sale todos los días para conocer Berlín: un recorrido por su historia. La guía era una chica andaluza (que muchos confundieron con canaria: ¡pobre gente! jajaja) que comenzó con mal pie, contando esas bromas prefabricadas para la ocasión, pero que luego lo supo arreglar con sobresaliente a lo largo del paseo. Partimos de la Puerta de Brandenburgo y pasamos por el monumento al Holocausto Judío (no sé si es su nombre correcto) para continuar por el búker-secreto-de-Hitler (está debajo de un aparcamiento y todo el mundo lo sabe: ¡vaya secreto!) hasta llegar al "Check Point Charlie" donde hicimos una parada técnica. Después de descansar un poco y de que yo me comiera una tarta de zanahoria (uhmm, ¡qué rico!) seguimos el paseo yendo por "Friedrichstrasse" y desviándonos para pasar por "Gendarmenmarkt" con su dos cúpulas gemelas (una para los alemanes y otra para los franceses). Seguimos hasta la "Bebelplatz" rodeada de edificios antiguos y en la que se puede ver un monumento conmemorativo a la quema de libros por parte de los nazis en 1933. De ahí seguimos por "Unter den Linden" hasta llegar al "Lustgarten" justo enfrente de la catedral de Berlín. Así terminó el tour, con una explicación final apasionante sobre la noche en la que cayó el Muro. El paseo fue genial y se lo recomendaría a cualquier persona que pase por Berlín.
Continuamos haciendo turismo porque queríamos ver todo lo posible y fuimos hasta la "Alexanderplatz". La verdad es que me sorprendió mucho porque de mi anterior visita en 2001, la recordaba como un sitio bastante más decadente de lo que me encontré. Ahora parecía más moderna incluso con centros comerciales nuevísimos. De ahí fuimos hasta los patios Hackesche, uno de los sitios que más me gustan de Berlín: una serie de patios interiores que casi parecen calles en sí mismos y que están decorados de una forma muy original. Terminamos el turismo del día yendo al "Nikolaiviertel" que se supone que es la zona más antigua de Berlín, pero que, como todo en Alemania, está realmente reconstruido. En ese momento nos fuimos a casa porque habíamos quedado para ir esa noche a la fiesta a la que amablemente nos había invitado Silvenne (lo siento si no se escribe así). La verdad es que fue una fiesta muy entretenida y nos encontramos allí con todos los becarios de Berlín y Milán (como nosotros estaban de visita). Después de la fiesta fuimos al súper-mega-cool-bar-Panorama (en gran medida porque yo quería :P), discoteca archiconocida en Berlín y en la que de la forma más arbitraria te pueden dejar en la calle. La cuestión es que después de esperar una hora en la cola, de 14 personas que éramos, sólonos dejaron entrar a nosotros 4 (Wendy, Victor, Patri y yo) jajajaja, ¡qué cool somos! Pero chulos que somos, que al ver que no dejaron entrar a los demás, decidimos salir nosotros también (por supuesto sin haber pagado la entrada).
El domingo por la mañana tocó darse prisa para visitar el "Mauerpark" y hacer el obligado brunch de domingo por la mañana, porque Patri se volvía esa tarde. ¡Adiós, Patri y muchas gracias por visitarme! Las risas que nos echamos con esta niña :P. La tarde la dedicamos básicamente a tirarnos en la zona nudista del "Tiergarten" (eso sí, sin desnudarnos jajaja). Esa noche fuimos con los otros becarios a cenar a un restaurante turco en Kreuzberg que la verdad estaba muy bien y luego fuimos a tomarnos algo a un sitio cerca en el que se negaron a servirnos "educadamente" porque habíamos descolocado los muebles, jajaja. Berlín ist zu cool für mich. El lunes hicimos algo más de turismo cerca del zoo y para poco más dio la visita a Berlín una ciudad que siempre está bien visitar. ¡Adiós, Rubén. Muchas gracias por hacernos de "guía"!
El domingo por la mañana tocó darse prisa para visitar el "Mauerpark" y hacer el obligado brunch de domingo por la mañana, porque Patri se volvía esa tarde. ¡Adiós, Patri y muchas gracias por visitarme! Las risas que nos echamos con esta niña :P. La tarde la dedicamos básicamente a tirarnos en la zona nudista del "Tiergarten" (eso sí, sin desnudarnos jajaja). Esa noche fuimos con los otros becarios a cenar a un restaurante turco en Kreuzberg que la verdad estaba muy bien y luego fuimos a tomarnos algo a un sitio cerca en el que se negaron a servirnos "educadamente" porque habíamos descolocado los muebles, jajaja. Berlín ist zu cool für mich. El lunes hicimos algo más de turismo cerca del zoo y para poco más dio la visita a Berlín una ciudad que siempre está bien visitar. ¡Adiós, Rubén. Muchas gracias por hacernos de "guía"!
Esa noche llegamos a Düsseldorf y antes de irnos a la cama nos comimos un kebap de los de al lado de mi casa: ¡los mejores kebaps del mundo! y a la cama. A la mañana siguiente, preparado para irme al trabajo me tuve que despedir de Wendy y Victor que se volvían a Tenerife. ¡Adiós a los dos. Mil gracias por visitarme. Los quiero mucho!
1 comentario:
No ha sido nada el servirles de "guía". Siempre estoy dispuesto para mostrar a mis amigos la "tan especial" ciudad en la que vivo y que tan bien conozco. Me alegré mucho de tenerles por aquí, a ver si te puedo ir a ver a Düsseldorf en breve.
besos
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