lunes, 12 de octubre de 2009

El famoso barco fiesta

Hace meses que organizamos el viaje que nos llevaría de Copenhague a Oslo en barco y la verdad es que no decepcionó. Llegué el viernes por la tarde y después de esperar a todo el mundo pusimos rumbo a Cristiana: la zona súper-mega-cool-fuma-porros de Copenhague. La verdad es que el barrio merece bastante la pena y resulta cuando menos curioso. Después de tomarnos unas cervezas ahí y de hablar mucho, mucho. Terminamos saliendo de marcha a un barco reconvertido en discoteca. Muy bien pensado por parte de David. Nos lo pasamos genial y terminamos a las 6:00 rumbo a casa y riéndonos a más no poder por frases como: "we are not as beautiful as you, but we are normal people".


El sábado después de dormir 3 horas salimos para ir a coger el barco, pero antes tocaba visita de la ciudad. La verdad es que CPH me sorprendió para bien. Es una ciudad muy bonita y al menos ese día estaba repleta de gente. Además, la sirenita no me decepecionó: había escuchado tantas cosas malas de la pobre, que me pareció una maravilla. El resto de la ciudad con sus canales y su arquitectura me gustaron mucho.





A las 17:00 embarcamos y vimos nuestro zulo-camarote, pero total para no dormir que más queríamos. Antes de cenar David, Kike, Roberto y yo fuimos al jacuzzi a relajarnos un rato. Luego quedamos en la cubierta con las chicas para cenar y empezar a beber algo. Cuando ya el frío era demasiado decidimos que había llegado el momento de bajar a la discoteca. La verdad es que el barco no era muy "fiesta", pero ya estábamos nosotros para que lo fuera. ¡Qué desfase de noche! Entre gente demasiado contenta, gente encerrada fuera de su camarote ;) y paseos aquí y allá, la verdad es que resultó ser divertidísima. Algunos de nosotros decidimos no irnos a dormir porque queríamos ver el amanecer y la entrada al fiordo de Oslo. Así que en toda esa noche no dormí nada, pero mereció la pena.






El domingo al llegar a Oslo, todos más muertos que vivos, visitamos un poco de la ciudad y yo ya no tuve tiempo de más: de vuelta a Ddorf a descansar que de verdad lo necesitaba. Otra grandísima fiesta más que pasé con los informáticos (que siempre demuestran que son los mejores).

1 comentario:

Kike dijo...

NO me lo puedo creer, acabo de publicar la misma entrada Jesus!! Echando de menos el ICEX y los viajes o q?? Jajaja, yo ahora voy a por la de Tai, tu tambien o q?? Un abrazoo!!